miércoles, 27 de agosto de 2008

La paciencia todo lo alcanza

My Apple Family por Jilles.It's so thin!

Cuando decidí cambiar el portátil, pensé en pasarme a los Mac (tal como comenté en otro post). La duda era qué modelo elegir. Claro está que tenía que ser el más económico (que aun así era más caro que un PC similar). El problema es que el modelo básico era de un blanco inmaculado, y me lo imaginaba 'sucio' con el tiempo... y el modelo negro era bastante más caro. A todo esto se añadía que en los foros se hablaba de problemas con la fragilidad de la carcasa, con la pantalla, con apagados sin control... Y encima se avecinaba una más que probable actualización de los equipos. El modelo de gama superior (el Pro) tenía carcasa de aluminio, pero resultaba excesivo para mis necesidades. Asi que, si eso ocurría en septiembre, decidí esperar noticias en enero. Durante ese tiempo dejaron de aparecer comentarios sobre esos problemas (señal de que se estaban corrigiendo en las nuevas remesas). Llegado el tiempo van y sacan el Macbook Air, un portátil de sólo 1,5 kg. de peso, finísimo (ver foto pequeña) y carcasa metálica, aunque con poco disco duro... La tentación era fuerte, pero las prestaciones y sobre todo el precio me acabaron de decidir por un modelo básico pero aumentándole la RAM y el disco duro, aunque fuera blanco (hay protectores de plástico, menos estéticos pero eficaces)... y cuando ya lo tenía pedido van y ¡bajan los precios de toda la gama y aumentan el rendimiento!. Esto suponía que por unos 80 euros más llegaba al modelo negro, que tenía justo la RAM que quería y encima doblaba el disco duro que tenía previsto. Menos mal que lo pedí en una modesta tienda especializada y no por internet, y gracias al excelente trato personalizado no tuve ningún problema en que me cambiaran el pedido. Al final resulta que estoy muy contento con el negro, que además es más pequeño que mi anterior portátil y pesa 1 kg. menos... Así que no echo de menos el Air, al menos espero que sea así por unos añitos.
Si tuviera que sacar alguna conclusión sería: no comprar los productos que acaben de salir, sino una vez testados en el mercado; no lanzarse a comprar con urgencia o por impulso -salvo estricta necesidad- para ir tanteando el terreno y tener un margen de decisión; y saber muy bien cuáles son nuestras necesidades y posibilidades. Y después de todo esto -y no menos importante-... que nos guste.

No hay comentarios: